martes, 14 de septiembre de 2010

Sobre tés y cafés

En algunas ocasiones descubrimos que algo que jamás nos había gustado, de repente un día empieza a picar la curiosidad de volver a probarlo y cuando encuentras el momento de volver a saborearlo, acaba gustándote.

Bien pues ese es mi caso (y seguro que el de más de uno XD). De pequeña, iba alguna vez al camping con mi prima (tendría yo unos 9 años) y ella todas las mañanas se bebía su café con leche, supongo que descafeinado. Pues una de esas mañanas lo probé, creo que la sensación y el pensamiento que tuve fue: "Qué asco!"

A pesar de esto, reconozco que el olor a café me ha gustado siempre. Donde vivo, antes había una pequeña tostadora (fábrica de café) y recuerdo que a las 5 de la mañana me entraba por la ventana el olor a café tostándose.

Años más tarde, no recuerdo bien el momento, el lugar ni si estaba acompañada, me dió por hacerme un café con leche. A pesar de que me pareció un poco fuerte, le eché un poco de azúcar y oye, me sentó de maravilla.

Actualmente me gusta tomarme uno para desayunar. Eso sí, dulce y con leche.


Pues algo así me ha pasado también con el té y las infusiones. Hasta hace pocos años pensaba que de infusiones sólo estaban las típicas manzanillas, que me daba mi madre de pequeña para el dolor de tripa, la tila, para los nervios y el poleo menta, que siempre se lo han tomado en las reuniones familiares el que no bebía café. De tés, más de lo mismo, el verde, el rojo y el negro.

Pues supongo que también habrá influido el hecho de que se está poniendo de moda lo espiritual y el té que al ser oriental (nada que ver con la espiritualidad, pero bueno, así son las modas, que relacionamos lo oriental con lo espiritual) pues han empezado a sacar millones de combinaciones de sabores, de frutas, de hierbas, de chocolate (descubrimiento de hoy XD)...

Aprovechando que estoy a dieta (maldita sea!) me estoy aficionando a las infusiones. Ahora tengo en mi haber una que es de relax, lleva tomillo, hierba de San Juan y melisa (caja verde azulona de hacendado); el otro se llama "Diet", este creo que lleva, manzana, romero, y no sé que más (la caja rosa del condis). Oye, que me tomo una al día, están muy buenas.

De té de momento sólo he probado el de frutas del bosque, que madre mía, que bueno está; el problema es que no lo encuentro para comprarlo por ningún sitio, si sabéis de alguna tienda de té a granel decidmelo ¿eh? si no supongo que me tocará esperar a alguna feria medieval.

Poco a poco iré probando algunos más. Aunque el té rojo, por el olor me ha parecido bastante fuerte para mi gusto, pero me gustaría poder decir que lo he catado por lo menos. Si me recomendáis algunos más, estaré encantada de probarlos.

Pues con esto finalizo la entrada de hoy, que aunque absurdo, es algo curioso. Un saludo desde mi escondite.

3 comentarios:

  1. El té rojo ya lo probaste y fuí testigo de tu cara de rancia. xDD

    Y, por cierto, hierba es con B. :P (K)(K)

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  2. El té verde con menta poleo no está mal... o al menos un día lo compré con ganas y no me desagradó, para como soy yo con estas cosas... :S si quieres un día de estos te paso algún sobrecillo y lo catas ^^
    Habrá que probar el de frutas del bosque!! No será muy empalagoso...?
    Ah! Y ahora me estoy iniciando en el café XD he probado un Capuccino de Carrefú que va con cacao y está...!!! Con kilo y medio de azúcar, pero bueno XD

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  3. Pues ya lo probaré ^^. Pues el próximo día que quedemos Marta, te invito a un té de frutas del bosque, que el otro día en la Fira dels Artesans de Mollet compré un paquete. Ya verás que de empalagoso nada, huele más de lo que sabe XD

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